Reflexiones

Vivo el Arte como un canal creativo por
donde elevar nuestro
estado vital y espiritual.

Un espacio de libertad de expresión, de provocación, de reflexión, de crítica…

El arte es un concepto que está en continua revisión.
Siento cierto escepticismo ante la palabra “arte“ porque en muchas ocasiones es una coartada para encubrir una serie de cosas.

El orden establecido e inamovible me asfixia; lo hacen, incluso, mis propios espacios, al cabo de un tiempo. Debo huir para conocerme. ¿Conciencia espacial? ¿Nomadismo? ¿Espíritu de búsqueda?

El EcoArt es un arte militante y revolucionario, con la meta final de reencontrar la armonía entre el hombre y la naturaleza.

De lo contrario, nos espera una transición desgarradora. Urge un despertar.

Mi trabajo es una recopilación de respiros, contradicciones, afirmaciones y tránsitos cuyo detonante es el descubrimiento
paulatino de mi misma.

No entiendo el arte sin riesgo
ni compromiso de futuro.

Mi obra refleja un indicio de una militancia artística y social que pretende provocar e
implicar al espectador.

Una obra de arte es más que un objeto: es un fragmento de historia de la humanidad.

El papel del artista es el de revelar, a través de las superficies del mundo, las formas
implícitas del alma.

Cuando existe una gran variación y una sensibilidad por el arte, significa que la sociedad ansía evolucionar hacia una mejora.
También traduce la revolución interna.

Cada obra es como un viaje: memoria y distanciamiento, huida, lejanía de lo ya conocido, sorpresa, acumulación, desconcierto, incomodidad, auto-recompensa.

Eres lo que haces. Si le dedicas a tu trabajo: esfuerzo, ilusión y energía, acabas creciendo de forma paralela.
Creamos lo que creemos

Nada puede ser creado sin la introspección
en soledad.
Y la introspección me ha dado la posibilidad de descubrirme a mí misma y de entender la naturaleza del ser humano.

Todos mis trabajos son trozos de mi propia realidad, fragmentos de experiencias, de momentos, de escenas grabadas por el consciente.

Un diminuto granito de arena en un inmenso desierto. Así me suelo sentir ante los grandes desastres medioambientales y desafíos actuales.

La solución a todos estos problemas no está sólo en manos de los gobiernos o multinacionales.

¡Ánimo! Muchos granitos de arena forman
grandes playas.